La fuerza centrífuga aleja los cuerpos.

La plataforma  sobre la que se mueven el hombre y la mujer gira muy rápidamente. Gira demasiado rápido. Se aferran para resistir esa fuerza, que quiere mantenerlos alejados.

Intentos de aproximación a un punto de suspensión

Un laboratorio de escritura

Debido a que acabo de alcanzar la edad en la que se puede, seriamente y cualquiera que sea el curso de los acontecimientos, anticipar los grandes rasgos de nuestra vida futura y hablar de sus días futuros con este aire pasado, me puse a elaborar un programa. Esta edad no era un umbral objetivo, ni una realidad temporal: esa edad era la conciencia de algo. Cualquiera que  sea el número de días que quedaba, e incluso según los pronósticos más audaces, sería demasiado corto. 

Mi objetivo era deshacer el tiempo. Eso en sí mismo era imposible. Pero había métodos de aproximación. Sería sencillo y definitivo. Una sola frase sería suficiente para decir esto: “Intentos de aproximaciones desde un punto de suspensión”.

Algo como un deseo de obra, pues, con sus motivos (sillas, escaleras, suelos...), sus variaciones y sus fuerzas (la gravedad, el equilibrio, la inercia...). Con esta perseverancia para acercarse al presente que siempre escapa. Y esta convicción de que un trabajo toma toda su consistencia en el tiempo. 

Por lo tanto, se trata de un proceso compartido a largo plazo por un equipo comprometido. 

El número…

¿Es anacrónico este formato tan específico, que se creía que había caído en desuso, reivindicado por un circo llamado “tradicional”, abandonado por un círculo llamado ‘nuevo’? He optado por reinvertir esta forma, cuya singular economía tiene muchas especificidades. 

El número es la forma corta por excelencia. Se ha mencionado a menudo una duración que se aproximaría a 8 minutos, pero eso no significa nada. El número es un condensado. Es la reducción máxima de una forma que alcanza su mayor intensidad. En la cocina, el principio de cocción podría parecerse a él. 

Al final de este proceso de simplificación del desgaste por extracción, hay un sueño de absoluto: un número debe mantenerse en pie por sí solo. Sin el escándalo cultural, en todos los contextos. Un número debe durar. A pesar de la vida que pasa sobre los cuerpos, y la vejez que inevitablemente viene, el número existirá durante toda una vida. Un número exitoso debe ser capaz de jugar en cualquier lugar, todo el tiempo. 

Y sin embargo, a pesar de esta exigencia infinita, nunca un número pretenderá el sentido, con esa “S” mayúscula. No tiene esa arrogancia. Ningún número es soberano, ni siquiera el número 1. Un número nunca olvidará la multiplicidad de conjuntos. No dice nada más que lo que dice, sin negar los otros números que vienen antes, después de él. Él tiene esa humildad. El sentido está sólo en él y es por eso, y sólo por ello, que se une al universal. 

 

 

 

Yoann Bourgeois Art Company

Yoann Bourgeois, acróbata, bailarín, malabarista… el vértigo está integrado en todo lo que hace. Lidera un equipo que crea obras de arte con un compromiso y una pasión que solo puede hacerlo un grupo muy unido, juntos han capeado tormentas y conquistado la cumbre.  En sus trabajos el coreógrafo pone en diálogo la arquitectura con su propuesta de riesgo físico. La suspensión es una búsqueda existencial.

Yoann Bourgeois Art Company está financiada por Drac Auvergne-Rhône-Alpes / Ministerio de Cultura y Comunicación

Fechas	Horarios	Lugar
Sábado 27 de mayo	21, 22 y 23 horas	Ruinas de la Colegiata de Santa María La Mayor
Domingo 28 de mayo	12:30, 18:30 y 19:30 horas	Ruinas de la Colegiata de Santa María La Mayor

Ficha artística